El Mercurio, 14 de noviembre, Nestlé Chile avanza en su compromiso con proteger y dar acceso al agua

A través del programa ‘Caring for Water’ la empresa desarrolla planes para proteger cuencas hidrográficas, apoyar a proveedores agropecuarios para que hagan un uso eficiente del recurso y ampliar la disponibilidad de agua potable a las comunidades donde está presente.Descrita ya entre los expertos como ‘la otra pandemia’, la escasez hídrica es una manifestación cada vez más contundente y preocupante del cambio climático en todo el mundo. Por esta razón, Nestlé Chile ha seguido profundizando su programa global ‘Caring for Water’, orientado a mejorar el uso eficiente del agua en sus fábricas, proteger cuencas hidrográficas de uso compartido, apoyar a los proveedores agropecuarios en la gestión consciente del agua, y ampliar el acceso a agua potable y saneamiento en las comunidades donde tiene sus operaciones.

Este programa se enmarca en su modelo de ‘Creación de Valor Compartido’ (CVC), que busca contribuir a un futuro más saludable para las personas, las comunidades y el planeta, y avanzar a paso firme en el cumplimento de sus 36 compromisos públicos alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.

Gracias a la implementación de ‘Caring for Water’, entre 2010 y 2020, Nestlé Chile redujo en casi un 40% el consumo de agua por tonelada de producto elaborado a partir de la ejecución de diversos proyectos e iniciativas propias. Además participa de otras colectivas como el Fondo de Agua Santiago-Maipo, plataforma colaborativa multisectorial que nació con el objetivo de abordar los desafíos de la cuenca del río Maipo, que Nestlé integra desde el directorio, y que cuenta con un plan estratégico al 2025 para contribuir a la seguridad hídrica del río que abastece de agua a la Región Metropolitana.

En paralelo, la compañía ha realizado estudios hidrogeológicos y sociales de los territorios donde se encuentran emplazadas sus fábricas y diseñado programas socio-ambientales para cada una de ellas. Asimismo, la compañía evalúa permanentemente nuevas iniciativas tecnológicas y operacionales para seguir reduciendo el uso de agua en todos sus procesos productivos.

Nestlé Chile también desarrolla planes para continuar disminuyendo las descargas de RILes (Residuos Industriales Líquidos) por tonelada de producto elaborado. Es así como en la última década, redujo este indicador en un 40%, mediante un robusto programa de tratamiento, reducción y reutilización, que le ha permitido ser cada vez más eficiente en el uso del recurso hídrico.

TRABAJANDO CON LOS PRODUCTORES DE LECHE

Otro eslabón de la cadena clave en el uso de agua es la producción de leche fresca. Por esta razón, la Política Lechera de Nestlé considera como pilar fundamental la sustentabilidad ambiental y dentro de ella, el uso eficiente del recurso, a través de planes para la protección de cursos de agua y aguas limpias, reutilización de aguas y aguas lluvias, separación de aguas limpias y sucias y uso de alternativas para evitar limpiar con agua, además del revestimiento de pozos purineros para evitar la contaminación de las napas subterráneas. Todas, prácticas de manejo de predios que son evaluadas por la compañía y que desde su implementación ha ido mejorando año a año: en 2020, el porcentaje de la leche con cumplimiento promedio de cuidado del agua llegó a 77%’.

AGUA POTABLE PARA LAS CAMELIAS BAJAS, BIOBÍO

A nivel de acceso, en las zonas rurales del país, la crisis hídrica es especialmente desoladora, con comunas que no tienen disponibilidad de agua, generando grandes dificultades para la vida diaria y el desarrollo de actividades económicas. El 47,2% de la población que vive en el campo no cuenta con abastecimiento formal de agua potable, por lo que deben abastecerse de pozos, ríos, vertientes, esteros o camiones aljibe.

Ante esta crítica situación, Nestlé Chile, en alianza con Fundación Amulén y la Municipalidad de Los Ángeles, con el apoyo de los Parques Eólicos Entre Ríos y Lomas de Duqueco, desarrolló un proyecto para la construcción y habilitación de un sistema de Agua Potable Rural (APR) para 35 familias de la comunidad de Las Camelias Bajas, que desde el mes pasado tienen por primera vez y para siempre, agua potable de manera permanente.

La captación se realiza mediante un pozo profundo, con caudal garantizado de tres litros por segundo, construido en un terreno perteneciente a la Junta de Vecinos del sector. En el mismo lugar, se dispuso de una caseta donde se realiza el tratamiento de potabilización del agua y su acumulación en dos estanques de 20.000 litros de capacidad, lo que sin duda, cambiará radicalmente la calidad de vida de esta pequeña localidad de la región del Biobío.