Los datos recogidos fueron asombrosos ya que la mitad de la población rural en Chile no cuenta con abastecimiento formal de agua potable, teniendo que recurrir a fuentes como pozos o norias, camiones aljibe o ríos, vertientes o esteros. Cuando falta el agua, el daño social, ambiental y económico es profundo.
Así comenzó la ruta que Fundación Amulén ha ido forjando. Hoy, el equipo Amulén trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas a través de la implementación de proyectos innovadores que dan acceso, entregan herramientas de fomento y transforman la vida de las familias que antes no tenían agua potable.